Las escuelas continúan cerradas y se declaró el estado de emergencia el lunes en la isla griega de Cefalonia a raíz del terremoto de 6,0 grados que dañó cientos de edificios y dejó varios heridos.
Cientos de habitantes de la isla pasaron la noche en sus autos después del sísmo de magnitud 6,0 grados que remeció la población de Lixouri en la isla del mar Jónico el domingo, y al que siguieron decenas de réplicas, algunas de hasta 5.2 grados, según el Instituto de Geodinámica en Atenas.
Los sismólogos dijeron que aún no se podía predecir que el temblor del domingo, que según el Servicio Geológico de Estados Unidos alcanzó 6.1 grados, era el sismo principal o si habría uno más potente en los próximos días.
"Necesitamos 48 horas para decir con certeza del 99% que éste fue el sismo principal", dijo el investigador jefe del instituto, Thanassis Ganas, en entrevista por televisión. Pero agregó que el epílogo se desarrollaba sin inconvenientes y que las réplicas múltiples eran previsibles.
Cefalonia y las vecinas Zacinto e Itaka fueron arrasadas por terremotos potentes en 1953 que derribaron la mayoría de los edificios y causaron cientos de muertes. Desde entonces, las construcciones en la zona son de tipo antisísmico.