NO DESCARTAN EPIDEMIA DE DAÑO CEREBRAL COMO SECUELA DEL COVID-19

Investigadores del University College de Londres advierten que durante la pandemia del covid-19 se ha registrado un incremento de los casos de una rara enfermedad autoinmune y a veces mortal conocida como encefalomielitis diseminada aguda (ADEM, por sus siglas en inglés), que se caracteriza por una repentina inflamación del cerebro y la médula espinal. 

COVID-19
Durante la investigación se hizo el seguimiento de 43 pacientes, de entre 16 y 85 años, con síntomas neurológicos y el covid-19 confirmado o sospechado, que recibieron el tratamiento en el Hospital Nacional de Neurología y Neurocirugía en Londres.

Nueve de doce pacientes con afecciones de inflamación cerebral fueron diagnosticados con la encefalomielitis diseminada aguda, enfermedad que puede ser provocada por infecciones virales y puede ocurrir en todas las edades, aunque en la mayoría de los casos ocurre en niños y adolescentes.

En circunstancias normales el equipo del hospital londinense trata a un paciente adulto con ADEM en un mes, pero en el período en que se llevó a cabo el estudio la cantidad de pacientes aumentó a uno por semana, lo que según los investigadores representa un incremento preocupante.

Además la investigación mostró que aparte de la inflamación cerebral, otras complicaciones neurológicas como el delirio, el derrame cerebral y el daño a los nervios también podrían estar asociadas con el nuevo coronavirus. Dentro del grupo, los científicos identificaron 10 casos de disfunción cerebral temporal con delirio, 8 casos de accidentes cerebrovasculares y 8 casos de daño al sistema nervioso.

Se reporta además que algunos pacientes en el estudio no experimentaron síntomas respiratorios graves, y el trastorno neurológico fue la primera y principal presentación del covid-19. "Hemos encontrado un número más grande de lo esperado de personas con afecciones neurológicas como inflamación cerebral, lo que no siempre se correlacionó con la gravedad de los síntomas respiratorios", afirmó Michael Zandi, el coautor principal de la investigación. 

El neurólogo del University College de Londres no descartó la posibilidad de que nos enfrentemos a una epidemia a gran escala de daño cerebral relacionado con la pandemia del nuevo coronavirus "quizás similar al brote de encefalitis letárgica en las décadas de 1920 y 1930", que se produjo después de la pandemia de gripe de 1918.

Sin embargo, los investigadores señalaron que el virus SARS-CoV-2 que causa el covid-19 no se detectó en el cerebro o el líquido cefalorraquídeo de ninguno de los pacientes examinados. Esto sugiere que los síntomas neurológicos no fueron causados directamente por el virus, sino que parecieron provenir de la respuesta inmune en lugar del virus en sí.