Un terremoto de 6,1 grados de magnitud sacudió el oeste de Japón y causó la muerte de tres personas, incluida una niña de 9 años, y más de 300 heridos, según informó el Gobierno.
El sismo se registró a las 07:58 hora local y tuvo su hipocentro a 13 kilómetros de profundidad en la prefectura de Osaka, en la isla de Honshu -la mayor del archipiélago nipón- y a unos 500 kilómetros al oeste de Tokio, informó la Agencia Meteorológica (JMA).
El temblor, por el que no se activó la alerta de tsunami, alcanzó el nivel 6 bajo en la escala japonesa cerrada de 7 grados (centrada en el grado de agitación en la superficie) en la prefectura de Osaka y de 5 alto en la prefectura de Kioto.
El terremoto ha causado la suspensión del servicio de tren bala en la zona, lo mismo que ha ocurrido con los servicios ferroviarios locales en las prefecturas de Osaka, Shiga, Kioto y Nara.
El aeropuerto de Kansai (Osaka), el más importante del oeste de Japón, fue cerrado mientras se revisaba el estado de sus pistas. Por su parte, las autoridades informaron de que ninguno de los 15 reactores con los que cuenta esta región se han visto afectados por el temblor.
El Gobierno de Japón puso en marcha un equipo especial para recopilar información relacionada con el fuerte sismo y el portavoz del Ejecutivo, Yoshihide Suga, pidió a los ciudadanos que se mantuvieran atentos a las novedades a través de los medios de comunicación. En la prefectura de Osaka unas 170.000 viviendas sufrían cortes de luz tras el temblor.