La tormenta polar "Pax" de proporciones históricas, según meteorólogos, comenzó a azotar este martes el sur de Estados Unidos y ha ocasionado al menos 10 muertes, todas relacionadas con accidentes automovilísticos.
La segunda tormenta invernal en las últimas dos semanas que azota la normalmente templada región del sur de Estados Unidos cubrió el miércoles de hielo autopistas, árboles y tendidos eléctricos, y dejó sin electricidad a casi medio millón de viviendas y negocios.
El inclemente clima fue señalado como responsable de por lo menos diez muertes a causa de accidentes de tránsito en toda la región, entre ellas tres personas que murieron cuando una ambulancia se salió de una carretera a causa del hielo en el occidente de Texas y se incendió. Casi 3.300 vuelos de aerolíneas fueron suspendidos a nivel nacional.
Un bombero de Dallas murió la noche del lunes después de ser atropellado por un automóvil, cuando auxiliaba a un conductor que se había quedado varado por el hielo en una rampa de la interestatal 20.
En otro accidente, el conductor de una camioneta murió la madrugada de este martes en el condado de Tarrant, Texas cuando su vehículo patinó en un puente cubierto de hielo y se impactó contra un árbol.
También durante las primeras horas del martes, un hombre murió en un accidente en la interestatal 20 y un adolescente de 16 años falleció la noche del lunes en el condado texano de Denton en un accidente entre dos vehículos cerca de la comunidad de Haslet.
Mientras que en Mississippi se informó de dos muertes en percances carreteros relacionados con el intenso clima.
Los meteorólogos advirtieron que habría una tormenta potencialmente "catastrófica" en el sur estadounidense, con capas de hielo de más de 2,5 centímetros (una pulgada) en algunos lugares. Pronosticaron caída de nieve durante la noche, con posible acumulación de 7,6 centímetros (3 pulgadas) en Atlanta y mayores niveles en las Carolinas.
Mientras los residentes del sur han prestado atención a las inusualmente extremas advertencias y se quedaron en casa mientras caía la nieve y la lluvia gélida, la tormenta se desplaza hacia el norte, amenazando con llevar el jueves unos 30 centímetros de nieve a los estados de la costa central del Atlántico y del noreste.