Un estudio elaborado por científicos australianos reveló que el plástico que ensucia los océanos del mundo continuará acumulandose los próximos 500 años.
Hay cinco islas de plástico en el planeta en los lugares donde convergen las corrientes marinas. Es más, esta proyección tan pesimista sólo se cumplirá si se deja de arrojar basura al mar, cosa que no está ocurriendo.
Algunos países han prohibido las bolsas de plástico y muchos ciudadanos son conscientes del daño medioambiental que supone tirar plástico al mar. Pero muchas personas aún no se han dado cuenta de lo que significa desechar basura plástica en el océano.
La primera isla de plástico, una masa de basura que se arremolina en un vórtice oceánico compuesta por desechos de plástico, fue descubierta por primera vez en el norte del océano Pacífico Norte hace ya quince años. Fue la primera, pero pronto se descubrieron otras, aberraciones ecológicas creadas por el ser humano.
Un equipo de investigadores del Australian Research Council Centre of Excellence for Climate System Science ha estado investigando cómo se forman y cuánto tardarán en desaparecer. El estudio ha sido dirigido por el científico Erik Van Sebelle.
La investigación señala que la acumulación de plástico en esos puntos concretos es un proceso extremadamente lento. Tarda años, décadas en formarse. Los desechos plásticos van llegando y depositándose poco a poco. Sin embargo, a largo plazo, tiene graves consecuencias para el medio ambiente y la salud.
Aunque dejáramos de arrojar plástico en el océano, las islas de plástico seguirían creciendo durante, al menos, otros 500 años. Crecerán y crecerán por todo el plástico que ya está en el mar, pero que aún no ha llegado a su destino. Algunos trozos, los más pequeños, no llegarán porque serán engullidos por los peces, que los confunden con plancton. Peor aún.
En 1997, el oceanógrafo Charles Moore descubrió la gran isla de basura del Pacífico, una zona de desechos situada entre la costa californiana, que rodea Hawai y llega hasta Japón.