El poderoso tifón "Bolaven", dejó en Corea del Norte 48 muertos, medio centenar de heridos o desaparecidos y miles de casas destrozadas o inundadas, informó la agencia del régimen KCNA.
Las fuertes lluvias y los vientos huracanados del "Bolaven" provocaron graves daños en 6.700 casas, mientras que 21.180 norcoreanos perdieron por completo sus viviendas, detalló la agencia.
Corea del Norte, que tras el paso del tifón informó de que todas las áreas del país fueron afectadas, determinó que los vientos, que en la vecina del Sur alcanzaron una velocidad de hasta 186 kilómetros por hora, dañaron unas 50.000 hectáreas de cultivo.
Según el despacho de la KCNA, también afectó a 45.320 hectáreas de arrozal y otros cereales, mientras que el viento derribó 16.730 árboles y paralizó la actividad en 880 edificios públicos e industrias.
Los graves daños alcanzaron también a decenas de centros médicos y educacionales que quedaron destruidos, según la KCNA.
"Bolaven" provocó en Corea del Sur la muerte de al menos 18 personas y siete desaparecidos, así como cancelaciones en el transporte y cortes eléctricos en 1,76 millones de hogares.
En el Sur, el tifón dejó lluvias torrenciales de hasta 700 milímetros, y vientos huracanados que derribaron árboles, tejados o farolas, mientras que el fuerte oleaje destruyó muchas infraestructuras pesqueras, según informaron los medios locales.
Los destrozos agrícolas del tifón podrían agravar la delicada situación de Corea del Norte, después que un estudio realizado por el Instituto surcoreano de Economía Rural de Corea determinó que la sequía que padeció el régimen de Kim Jong-un en primavera podría suponer la pérdida de hasta 700.000 toneladas de cultivo.