En la madrugada del martes 22 de mayo, el oeste de Bulgaria fue sacudido por un fuerte sismo de 5,9 grados en la escala de Richter, una magnitud habitual en temblores, pero que en diversas ciudades de ese país se percibió con características de terremoto.
Bulgaria fue sacudida en la madrugada del martes por un fuerte terremoto, de una magnitud de entre 5,9 y 6 en la escala de Richter, informó la radio estatal.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), la magnitud del sismo fue de 5,8. Pero el Centro Sismológico Europeo Mediterráneo (EMSC) había elevado a 5,9 grados en la escala abierta de Richter la magnitud del terremoto cuyo epicentro estaba situado a unos 25 kilómetros al oeste de la capital y a una profundidad de diez kilómetros, entre la capital y la localidad de Pernik, a unos 30 kilómetros al sur de Sofía.
El movimiento telúrico fue sentido en todo el oeste y sudoeste del país. Los primeros reportes no hablan de víctimas o graves daños. En algunos edificios de la capital se formaron grietas.
Así lo aseguró el director del servicio de bomberos y protección de la población civil, comisario general, Nikolai Nikolov, a la agencia privada de noticias, Focus.
El terremoto que despertó a los habitantes de Sofía alrededor de las 03.00 hora local (00.00 GMT) e hizo que saliera a las calles presas de pánico, ha sido seguido por cuatro réplicas de magnitud hasta 3 grados en la escala de Richter.
Los habitantes de Sofía fueron sorprendidos por el sismo cuando dormían, a las 03:00 horas (00:00 GMT del martes). Pese a una fuerte lluvia, muchas personas abandonaron por temor sus casas y hubo cortes en los servicios de electricidad e Internet.
El sísmo, que ha sido sentido también en otras partes de Bulgaria Central y del Sur, provocó cortes de suministro de electricidad y las comunicaciones móviles que siguen dificultados en este momento.
Europa continúa temblando, más de 70 réplicas se han registrado en Italia, luego del fuerte terremoto que sacudio el norte del país el 20 de Mayo.