Puerto Rico toma medidas ante la posibilidad de que un gran sísmo y tsunami afecte a la isla.
El Gobierno cuenta desde ahora con un plan de
respuesta en caso de terremoto, después de la incertidumbre suscitada
por el sismo de 5,3 grados en la escala de Richter registrado el pasado sábado a 22 kilómetros de la costa oeste de la isla.
El último terremoto fuerte fue el del año 1918, de 7,4 grados en la escala
de Richter, que causó la muerte a 140 personas y generó un tsunami
acompañado por olas de más de 6 metros de altura.
La Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y
Desastres (Aemead) trabaja en la puesta en marcha de medidas de
prevención, la práctica totalidad de los generadores eléctricos de
Puerto Rico se ubican en áreas potencialmente inundables.Eso
quiere decir que en caso de un tsunami Puerto Rico se quedaría
totalmente a oscuras. El aeropuerto de San
Juan es otra de las infraestructuras que se inundarían si un terremoto
de gran magnitud y el consiguiente tsunami sacudieran la isla.
Puerto
Rico no se ubica en un área tan sísmicamente activa como países como
Japón o Chile, pero aun así se prepara para un evento de esa
naturaleza.
Los municipios costeros disponen de "Tsunami ready", un sistema de emergencia
de atención telefónica 24 horas al día, sirenas para alertar a la
población y la capacidad de llevar a cabo un plan de respuesta contra
terremotos.
El sismo que provocó incertidumbre entre la población
se produjo durante la madrugada del pasado sábado a poco más de 20
kilómetros de Mayagüez, localidad de la costa oeste.
Puerto Rico,
además del temblor del año 1918, sufrió otro en 1867, acompañado de un
tsunami, de poco más de 7 grados en la escala de Richter que se cobró la
vida de 30 personas.