El satélite geostacionario Galaxy 15, propiedad del operador Intelsat, dejó de responder a las órdenes desde su base de operaciones, y perdió su posición orbital de 133 grados, a causa de la última tormenta solar que dañó su transpondedor general.
Se confirmó la pérdida de control sobre el G15. A pesar de esto, continúa operando en banda C, por lo que oficialmente se ha convertido en un satélite zombie.
Este aparato vuela a la deriva y durante el tiempo que esto suceda podría provocar problemas e incluso dejar fuera de servicio a otros satélites, como su vecino AMC-11 (propiedad de SES de Luxemburgo) que se encuentra a sólo dos grados de distancia de la posición original del G15.
La empresa Intelsat informó a través de su vocero Diane VanBeber que los servicios fueron trasladados al Galaxy 12, el cual originalmente cubría la posición de 123 grados. El problema radica en que el G15 contaba con 24 transpondedores en banda C para cubrir servicios en América del Norte y otros tantos en banda L, utilizados por la FAA (Administración Federal de Aviación) de Estados Unidos, los cuales no posee el Galaxy 12.
Galaxy 15 fue lanzado el año pasado, debería haber tenido una vida útil operativa de 12 años…y no está asegurado. Cuando deje de operar en forma definitiva, pasará a formar parte del ejército de cerca de 160 “zombiesats” que vuelan con rumbo incierto alrededor de la tierra.
Los científicos están analizando cada uno de éstos eventos a fin obtener datos que ayuden a medir el grado de daños provocados por las tormentas solares actuales, que son de mediana intensidad, para obtener información más certera de los daños que éstas pueden ocacionar a fines del año 2012, cuando se espera la máxima actividad solar.
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