"EL TIEMPO SE ESTA AGOTANDO" ALERTA LA OMM ANTE NUEVO RECORD DE CO2

Las concentraciones de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera superaron el umbral de 400 partes por millón (ppm) en todo el hemisferio norte el pasado mes de abril, comunicó desde Ginebra, el 26 de mayo de 2014 la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

OMM ALERTA: "EL TIEMPO SE ESTA AGOTANDO" ANTE NUEVO RECORD DE CO2, 27 de mayo 2014
“Los valores máximos registrados en el hemisferio norte en primavera han rebasado ya el nivel de 400 ppm”, dijo la OMM, y además pronosticó que la concentración media mundial anual de CO2 superará ese umbral en 2015 o 2016”.

“El tiempo se está agotando”, afirmó el Secretario General de la OMM, señor Michel Jarraud.

"Esto debería servir una vez más de llamada de atención sobre el incremento constante de gases de efecto invernadero que determinan el cambio climático. Si queremos conservar nuestro planeta para las generaciones venideras, debemos adoptar medidas urgentes para contener las nuevas emisiones de estos gases que atrapan calor", dijo Jarraud.

Al llegar la primavera, antes de que el crecimiento de la vegetación absorba el dióxido de carbono, se registran los niveles más altos de CO2.

Este mes de abril se “notificaron concentraciones de CO2 en la atmósfera sin precedentes en la temporada”, en todas las estaciones de vigilancia del hemisferio norte que forman parte de la red de Vigilancia de la Atmósfera Global (VAG) de la OMM, agregó la organización.

El reporte alerta que el hecho que se superara el nivel de 400 ppm refuerza la evidencia de que la combustión de combustibles fósiles y demás actividades humanas son las responsables del incremento constante en los gases de efecto invernadero que atrapan el calor y calientan el planeta.

El CO2 es un gas de efecto invernadero que permanece en la atmósfera durante cientos de años, y su ciclo de vida en los océanos es aún más prolongado.

En el decenio 2002-2012, los científicos estiman que este gas fue responsable de un 85 por ciento del incremento del efecto de “forzamiento radiactivo”, que produce el calentamiento.

Este “forzamiento radiactivo” entre 1990 y 2013 aumentó un 34% debido a los gases de efecto invernadero, según las últimas cifras suministradas por la Administración Nacional del Océano y de la Atmósfera (NOAA) de Estados Unidos de América, agregó la OM en su informe.

En 2012 el CO2 presente en la atmósfera “alcanzó 393,1 partes por millón en 2012, es decir, un 141% respecto al nivel preindustrial de 278 partes por millón”, según datos del Boletín de la OMM sobre los gases de efecto invernadero.

Durante los 10 últimos años, la cantidad de CO2 presente en la atmósfera ha experimentado en promedio un aumento de 2 partes por millón por año.

Desde 2012, todas las estaciones de vigilancia en el Ártico registraron en primavera concentraciones medias mensuales de CO2 superiores a 400 ppm, de acuerdo con los datos suministrados por las estaciones de la Vigilancia de la Atmósfera Global en Canadá, Estados Unidos de América, Noruega y Finlandia.

“En marzo y abril, las estaciones de la Vigilancia de la Atmósfera Global en Alemania, Cabo Verde, España (Tenerife), Irlanda, Japón y Suiza notificaron concentraciones medias mensuales superiores a 400 ppm”, agregó la OMM.

Los científicos observan que en el hemisferio norte hay más fuentes antropógenas de emisión de CO2 que en el hemisferio sur, además es la biosfera la que es capaz de controlar también el ciclo estacional de los niveles del gas.

Debido a esto el nivel mínimo de CO2 se registra en verano, en el período en que las plantas absorben grandes cantidades del gas.

A su vez “los niveles máximos de invierno y primavera obedecen a la falta de absorción biosférica y a un mayor número de fuentes de descomposición de la materia orgánica, así como emisiones de origen antropógeno. Por lo tanto, el ciclo estacional más marcado ocurre en el extremo septentrional”, sostiene el equipo de OMM.

En el mundo entero hay aproximadamente 130 estaciones en 50 países que miden el dióxido de carbono y la Vigilancia de la Atmósfera Global de la OMM coordina las observaciones de CO2 y de otros gases que retienen calor en la atmósfera, como el metano y el óxido nitroso, registrando y comparando entre sí todas estas mediciones.