Una histórica ola de frío Siberiano con temperaturas de hasta 50 grados centígrados bajo cero, la mayor que se recuerda en un mes de diciembre desde 1938, se ha llevado más de 60 vidas en Rusia en una semana.
El mayor número de muertes se han producido en la región de Cheliábinsk, en los Urales, donde fallecieron por congelación 20 personas. Las temperaturas en Cheliábinsk, capital de la región, alcanzaron los 32 grados centígrados bajo cero la pasada madrugada.
Otras quince personas, once hombres y cuatro mujeres, murieron en la región de Altái en las últimas 72 horas, cuatro de ellos en plena calle, a varios kilómetros de sus viviendas.
Al menos 322 personas se han dirigido en lo que va de invierno a los servicios sanitarios con signos de congelación, de los cuales 175 han sido hospitalizados, según reveló a la agencia oficial RIA-Novosti el Ministerio de Sanidad ruso.
Tan solo en las últimas 48 horas, con el anticiclón instalado sobre gran parte de Rusia, 102 personas han sido hospitalizadas.
La ola de frío que recorre todo el país, desde sus fronteras más occidentales hasta el océano Pacífico, es la más prolongada desde hace 75 años en un mes de diciembre.
Las temperaturas más extremas, inferiores a los 50 grados bajo cero, se han registrado en la península de Chukotka y la región de Magadán.
En Moscú, la ola de frío se prolongará al menos hasta el próximo domingo, según los meteorólogos, y se convertirá en la más larga en más de 50 años para un mes de diciembre.
En Moscú, la ola de frío se prolongará al menos hasta el próximo domingo, según los meteorólogos, y se convertirá en la más larga en más de 50 años para un mes de diciembre.