Más de 100 000 personas se han visto afectadas por graves inundaciones en Acre, noroeste de Brasil, después de que varios ríos se desbordaron y alcanzaron niveles récord alrededor del viernes 19 de febrero de 2021.
Las autoridades declararon la situación como una emergencia, diciendo que el estado se enfrenta a uno de los más graves. Son tiempos desafiantes en la historia.
En Cruzeiro do Sul, el río Jurua alcanzó niveles récord de 14,31 m (46,94 pies) el viernes, rompiendo el máximo anterior de 14,24 m (46,71 pies) establecido en febrero de 2017. Alrededor de 33 000 personas han huido de sus hogares en el municipio.
En Sena Madureira, el río Laco alcanzó los 18,04 m (59,18 pies), muy por encima del nivel de la etapa de inundación de 15,2 m (49,8 pies). Alrededor de 18 000 personas se han visto afectadas por inundaciones en todo el municipio.
El sábado 20 de febrero, alrededor de 28 000 personas se vieron afectadas luego de que el río Tarauaca alcanzara los 11,05 m (26,25 pies), por encima del nivel de inundación de 9,5 m (31,2 pies).
En Fejio, más de 3200 personas se vieron afectadas después de que el río Envira saltó a 14,25 m (46,75 pies), superando la etapa de inundación de 14 m (46 pies).
En Santa Rosa do Purus, el río Purus alcanzó los 9,46 m (31,03 pies) excediendo la etapa de inundación de 9 m (29,5 pies). Más de 1500 personas se han visto afectadas, aunque los niveles han caído por debajo de los 7 m (22,96 pies).
En tanto, el río Acre en Rio Branco se situó en 15,64 m (51,31 pies), superando la etapa de inundación de 14 m (45,9 pies), que afectó a 2700 familias.
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