CLIMA MUY SEVERO AZOTA PROVINCIAS DEL ESTE DE SUDAFRICA

Se han confirmado al menos 6 muertes, mientras que docenas de propiedades han sido dañadas o destruidas después de que tormentas severas, granizo muy grande, un tornado EF-3, rayos y fuertes vientos azotaron las provincias del este de Sudáfrica en Martes y miércoles 17 y 18 de noviembre de 2020.

En KwaZulu-Natal, se informó de la  muerte de dos personas,  mientras que una permanece desaparecida después de que una gran tormenta de granizo acompañada de un rayo golpeara la provincia. Un niño de 10 años resultó herido en Umuziwabantu.

Las piedras de granizo que se describieron como más grandes que una pelota de golf dañaron unas 70 casas en el municipio de Msunduzi. 

"Una mujer de 22 años sigue desaparecida y se cree que fue arrastrada al intentar cruzar el río local en la sección Umlazi F en eThekwini", dijo el funcionario Sipho Hlomuka.

En Eastern Cape, el Servicio Meteorológico de Sudáfrica (SAWS) confirmó que se formó un tornado EF-3 en el área de Mthatha, dañando casas, edificios y lanzando automóviles al aire.

Las tormentas eléctricas multicelulares viajaron hacia el este, y durante las siguientes tres horas, viajaron casi 280 km (174 millas) desde Graaf-Reinet hasta Bofolo, mientras que una tormenta que se intensificaba al sur de Burgersdorp se movió unos 78 km (48 millas) al sureste, explicó SAWS. .

Poco después, hubo otro cambio en el movimiento de la tormenta: los vientos muy fuertes de la tormenta multicelda intensificada provocaron daños a propiedades, casas y vehículos, incluido el aeropuerto de Mthatha. Los fuertes aguaceros también provocaron inundaciones localizadas, mientras que los fuertes vientos arrancaron árboles.

"Las aulas de la escuela secundaria Jumba y la escuela primaria Tabase fueron destruidas por el tornado que azotó Mthatha el martes. Los alumnos de séptimo grado en Tabase escribieron sus exámenes en escritorios empapados y aulas con goteras mientras la lluvia continuaba el jueves", publicó un periodista local en Twitter.

"Los laboratorios de computación, los libros y las máquinas de impresión fueron destruidos. El área ha estado sin electricidad desde el martes, por lo que los maestros no tienen otra opción que pedir hacer copias en papel de las preguntas del examen en una escuela de la ciudad".

Se han confirmado al menos cuatro muertes, mientras que decenas se quedaron sin hogar. La ministra de asentamientos humanos, Lindiwe Sisulu, describió el evento como "impactante más allá de lo que se pensó inicialmente".