El 16 de abril, a las 01:25 (hora local) se registró un nuevo sismo de magnitud 7,4 en Kumamoto, isla de Kyushu. Así lo reporta el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGC). Unos minutos antes se habría registrado un sismo de magnitud 7,1 a 7 km de esta ciudad japonesa.
Se emitió una alerta de tsunami que fue lavantada minutos después.
Los primeros reportes indican que el terremoto no afectó el funcionamiento de la Central Nuclear en el sureste del Japón.
En menos de 30 minutos se registró una réplica de magnitud 6,0 en el sur del país.
Estos nuevos terremotos son los más fuertes registrados desde que el jueves un sísmo de magnitud 7,0 grados golpeó la isla y provocó nueve muertos y 900 heridos, de los cuales 50 están graves.
Desde entonces, se han registrado más de 100 réplicas en la zona, por donde pasa una falla geológica que atraviesa la región.
"El último terremoto se sintió tan fuerte, o incluso más fuerte que el sismo original", dijo a la AFP Shotaro Sakamoto, agente de la prefectura de Kumamoto.
La cadena de televisión NHK informó que el nuevo terremoto dejó varios heridos y provocó el hundimiento de un puente en la ciudad de Kumamoto.
También reportan a personas atrapadas bajo escombros en varias localidades.
Japón, situado en la intersección de cuatro placas tectónicas, sufre cada año más del 20% de los sismos más fuertes del planeta.
Los japoneses son todavía más sensibles a los peligros de los temblores desde el tsunami de marzo de 2011, que mató a unas 18.500 personas y provocó un grave accidente nuclear en la central de Fukushima.