El niño Modoki es un fenómeno oceánico-atmosférico en el que interactúan las aguas superficiales del Océano Pacífico tropical con la atmósfera circundante, lo que genera grandes alteraciones climáticas en muchas partes del mundo así como cambios significativos en diversos tipos de ecosistemas.
Las temperaturas superficiales del Océano Pacífico tropical, establecen la aparición de dos eventos, los cuales son: El Niño, que se presenta al tener anomalías cálidas y La Niña, que se presenta al tener anomalías frías.
La combinación de ambos elementos, el atmosférico y el oceánico, ha sido clasificado como un nuevo tipo de fenómeno en el Pacífico Tropical llamado el Niño Modoki. La palabra Modoki fue introducida por el científico Japonés Toshio Yamagata en el año 2004 mientras explicaba las causas probables tras las condiciones climáticas anormales sobre Japón. Yagamata es profesor de la Universidad de Tokio y se especializa en Dinámica Climática.
Modoki es una palabra Japonesa clásica que significa ‘similar pero diferente‘.
La diferencia entre El Niño y el Niño Modoki es que en este último existe una conjunción entre las características del primero sumadas al calentamiento del OcéanoAtlántico Sur y la interacción del sistema meteorológico del polo sur.
El Niño y ahora el Niño Modoki son fenómenos muy estudiados en la actualidad. El impacto sobre las condiciones históricas del tiempo en varios países y, por ende, en las economías de los mismos ha logrado que se establezcauna extensa red de observación, la cual ha motivado una activa investigación sobre el fenómeno.
¿Cómo Influye en el Cono Sur?
El año climático 2014/2015 observó un estado definido por ‘El Niño Modoki‘. Estas particularidades restaron vigor a ‘El Niño‘ de manera que los factores que controlaron el clima fueron otros:un calentamiento del Océano Atlántico Subtropical Sur, frente a las costas del sur del Brasil, Uruguay y La Argentina y un fuerte enfriamiento del Pacífico Sur debido a la activación del sistema meteorológico del Polo Sur.
El resultado de esta compleja interacción generó una fuerte concentración de las precipitaciones sobre el este de la Región Pampeana, el sur y el centro-sur del Brasil y la mayor parte del Uruguay, provocando intensas tormentas, con vientos, aguaceros torrenciales y posibles granizadas; así también ocasionando precipitaciones extremadamente desparejas e irregulares, tanto en el tiempo como en el espacio, sobre las áreas que se encuentran ubicadas al nordeste y al sudoeste de la franja de máxima actividad, debilitando las entradas de aire polar, dando un régimen de heladas benigno y una predominancia de lapsos extremadamente cálidos y húmedos.
Esta interacción de factores contrapuestos continuará dando como resultado una marcha climática muy irregular, con predominancia de lapsos cálidos y lluvias abundantes.
A partir del inicio del otoño 2015 comenzará el año climático 2015/2016 que en lo referente al fenómeno de ‘El Niño‘ será neutral, pero que seguirá siendo controlado por el calentamiento del Atlántico Subtropical Sur y la activación del Polo Sur.
Durante el otoño y el invierno, es probable que la circulación polar se vigorice, desplazando a los vientos tropicales e incrementando las irrupciones de aire polar, frío y seco, que provocarán heladas más intensas que en el temporada anterior.
Al llegar la primavera 2015, volverá a imponerse gradualmente la circulación tropical, generando condiciones cálidas y húmedas, en forma similar a lo observado durante la temporada anterior.
El régimen térmico mostrará fuertes oscilaciones, alternándose con prolongados lapsos muy calurosos y secos, con cortas pero intensas irrupciones de vientos del sur, que harán bajar significativamente la temperatura.
Debido a la compleja interacción de factores que dominan el clima sudamericano, debe esperarse una sucesión de escenarios contrapuestos; a medida que se cumpla el proceso de disipación de ‘El Niño Modoki‘ y los vientos del trópico vayan perdiendo fuerza, debido al corrimiento hacia el norte de los sistemas meteorológicos.
Durante el otoño y el invierno se producirá una predominancia de la circulación polar.
Es probable que el verano 2016 observe un comportamiento similar, debido a la persistencia del calentamiento del Atlántico Subtropical Sur, el cual forma parte de un ciclo de larga duración, que se prolongará durante por lo menos una década a partir del presente.