Los científicos del Laboratorio de Física Aplicada Johns Hopkins, en Maryland, han desarrollado una nave espacial que debe golpear un satélite, de 150 metros de diámetro, del asteroide Dídimo 65803 y alterar la trayectoria de su vuelo.
Esta será la primera vez que la humanidad cambie la dirección de un cuerpo espacial de ese tamaño.
El asteroide Dídimo pasará a 10,5 millones de kilómetros de la Tierra en 2022.
Dídimo 65803 se compone de dos partes: el asteroide principal y un satélite, con un diámetro de 150 metros que gira a su alrededor.
El trabajo de los científicos estadounidenses ha sido realzado en el marco del proyecto AIDA ('Asteroid Impact and Deflection', 'Impacto de asteroides y deflexión'), anunciado en enero de este año por la Agencia Espacial Europea en colaboración con el Laboratorio Hopkins estadounidense. Asimismo la Agencia invitó a colaborar con ideas y conceptos a todos los científicos del mundo.
Está previsto que el lanzamiento de la nave se llevará a cabo en 2021. El proyecto tendrá un costo de 350 millones de dólares.
Dos naves espaciales participarán en la misión: la primera chocará con el asteroide y la segunda evaluará la eficacia del impacto. Los científicos aseguran que los curiosos podrán observar el ataque al asteroide desde la Tierra mediante telescopios.
El equipo espera que el impacto del DART’s (The Double Asteroid Redirection Test spacecraft) altere la trayectoria del satélite de Dídimo en entre un 0,5% y un 1%, proporcionando información importante sobre la viabilidad de este tipo de misiones en el futuro.
El interés hacia este proyecto ha aumentado de manera significativa a raíz de la lluvia de meteoritos que cayó el 15 de febrero en la provincia rusa de Cheliábinsk, en los Urales, causando un fuerte impacto psicológico y daños materiales.