14 personas murieron, por aplastamiento y electrocución, en la provincia de Buenos Aires a raíz de una tormenta sin precedentes, que se registró anoche y dejó a 5 millones sin electricidad.
Nueve personas murieron en el Conurbano bonaerense, cuatro en Capital, y una en Santa Fe.
Hubo ráfagas de 120 km/h y voladuras de techos y miles de arboles.
La actual alerta meteorológica se extendió a cinco provincias Argentinas.
Quilmes, Solano, Ezeiza y Bernal quedaron virtualmente incomunicados.
La fuerte tormenta destruyó antenas por lo que dejaron de funcionar las líneas telefónicas, entre ellas el 911, y los celulares. En Zárate y Campana, así como La Plata, el temporal también se hizo sentir con fuerza.
Durante horas, Ezeiza operó con demoras por los apagones de luz que obligaron a las autoridades recurrir a equipos de energía de emergencia.
El Ministro de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad de Buenos Aires, Diego Santilli, dijo, "creemos que la tormenta de ayer "fue un tornado".
"Son 14 los muertos y hay mucha gente herida, los daños materiales son incalculables.
Además dijo que la situación es consecuencia del "cambio climático que estamos viviendo".
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