Un sismo de magnitud 5,3 sacudió el martes el este de Turquía, la
región más devastada por los terremotos poderosos de este mes, dijo el
observatorio Kandilli.
El movimiento telúrico más reciente
golpeó la provincia de Van, pero no hubo reportes inmediatos sobre daños
o lesionados, señaló la agencia estatal de noticias Anatolia. Su
epicentro fue en la villa de Mollakasim, agregó el observatorio en un
comunicado.
"Van es hoy una ciudad fantasma"
Los sismos previos convirtieron a Van, capital
provincial de aproximadamente medio millón de habitantes, en un pueblo
fantasma, dijo el lunes el gobernador Munir Karaloglu, quien pidió ayuda
urgente para los sobrevivientes.
El terremoto de magnitud 7,3 del
mes pasado y uno de magnitud 5,7 de la semana pasada derrumbaron cerca
de 2.000 edificios, matando a 644 personas y dejando a miles sin
vivienda en esa provincia del este de la nación, donde el clima frío
está forzando a los sobrevivientes a soportar aún más sufrimiento.
Muy
pocos edificios propiedad del gobierno en la capital sobrevivieron al
sismo, dijo Karaloglu a Anatolia. Muchos residentes han huido porque
temen regresar a sus viviendas, incluso si no están dañadas.
"Es una ciudad fantasma", comentó Karaloglu. "Casi ninguno de los edificios está en uso", agregó.
El
gobernador pidió al país mostrar "aún más compasión" ante las
crecientes necesidades, que van desde vivienda hasta comida y ropa
abrigadora.
Quienes siguen sin vivienda estaban sufriendo un clima
congelante que no corresponde a la temporada. La agencia Anatolia citó a
funcionarios meteorológicos diciendo el lunes que la temperatura bajó
hasta -15 grados Celsius (cinco grados Fahrenheit) por la noche en el
poblado de Ercis, el cual fue el más afectado por el primer terremoto.