Los geólogos ya alertaron de la inevitable ocurrencia de un megaterremoto de entre 8,8 - 9,2 grados y posterior tsunami en la costa oeste de Estados Unidos.
Oregon es “como un embarazo de ocho meses y medio, que podría reventar de un momento a otro, con un gran terremoto masivo”
La alarma fue lanzada por la Oregon Seismic Safety Policy Advisory Commission, la cual dijo que desde el año 1700 no ocurre un evento de importante magnitud en la costa oeste.
La falla de Cascadia tiene un potencial para generar terremotos de entre 8,8 y 9,2 grados de magnitud, y el posterior tsunami podría tener alturas similares a la de Japón en marzo de 2011.
Los expertos advierten que un megaterremoto masivo a lo largo de la Falla de Cascadia podría también desencadenar otro sísmo de similar magnitud en la Falla de San Andrés.
Los geólogos compararon la evidencia de Japón, así como muestras del suelo marino, para llegar a su conclusión. “En los próximos años, Washington y el norte de Oregon enfrentarán un super terremoto en alta mar lo suficientemente potente como para matar a miles de personas y poner en marcha un tsunami que derribe las ciudades costeras.
“Cascadia, se extiende desde la isla de Vancouver hasta el norte de California, ha estado inactivo por más de 300 años, pero ahora los científicos creen que existe una probabilidad del 45 por ciento de que un terremoto de una magnitud de 9.0 o mayor ocurra en los próximos años.”
Correlación entre la Falla de San Andrés y la de Cascadia.
La Sociedad Sismológica de América, informó que la actividad sísmica en el sur de la falla Cascadia posiblemente provoque terremotos lo largo de la Falla de San Andrés.
La frecuencia con la que la falla de Cascadia produce terremotos de magnitud 8 o mayores, es cada 250 años y han pasado más de 300 años desde el último que golpeó
La vulnerabilidad de la costa de Oregon
La costa del noroeste de Oregon es susceptible a tsunamis locales y lejanos. La zona de subducción de Cascadia, en movimiento a partir de la parte este, desde la Placa Juan de Fuca, cumple con el movimiento oeste hacia la Placa Norte de las Américas, justo cerca de la costa del Pacífico Noroeste de los Estados Unidos y Canadá.
Se trata de una zona con una falla de 750 kilómetros de largo. Esta zona es muy activa tectónicamente, y por lo tanto, tiene el potencial para producir grandes terremotos y, posiblemente, los posteriores tsunamis. Se cree que esta zona de subducción se ha roto por última vez en el año 1700.