El norte de Italia sufrió este viernes un nuevo terremoto de 5,2 grados de magnitud en la escala de Richter, pero de momento no se tiene constancia de que haya causado graves daños materiales ni personales.
Según informó el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) de Italia, el sismo se produjo pasado el mediodía italiano a unos cinco kilómetros de profundidad y tuvo su epicentro entre las provincias de Lucca, Massa Carrara y La Spezia, en las regiones de Toscana y Ligura.
El terremoto fue advertido de forma clara en todo el norte del país y la costa toscana, al igual que en la región de Emilia Romagna, que hace poco más de un año, el 20 y el 29 de mayo de 2012, registró sendos movimientos telúricos de 5,8 y 5,1 grados respectivamente, que causaron 26 muertos y más de 350 heridos.
"Estamos verificando si hubo daños", informó a la AFP un portavoz de la Protección Civil.
El fuerte sismo provocó pánico entre la población que inmediatamente salió a las calles y se sintió también en varias ciudades de la costa, entre ellas Livorno e Pisa.
Los habitantes de esa región reaccionaron inmediatamente después de que dos temblores devastaron en mayo del 2012 la región de Emilia Romagna, en el noreste de Italia, en 15 días.
En Milán, la capital de Lombardía, al norte, el sismo se sintió sobre todo en los pisos altos.