MEXICO ZONA DE TERREMOTOS

La interacción de cinco placas tectónicas coloca a México en una zona de alta sismicidad, explicó el Servicio Sismológico Nacional del Instituto de Geofísica de la UNAM.

Los especialistas advierten que hay indicios de acumulación de energía que podría disparar un terremoto importante en Guerrero.

PLACAS TECTONICAS EN MEXICO
El organismo detalló que en promedio se registran 4 sismos por día. Este jueves a las 3:20 horas se registró un sismo de 6.0 grados Richter, con epicentro localizado en las cercanías de Ciudad Altamirano, en el estado de Guerrero. El sismo fue sentido en la Ciudad de México.

La interacción de cinco placas tectónicas: la placa de Norteamérica, placa de Cocos, placa del Pacífico, placa de Rivera y placa del Caribe es la razón de la alta ocurrencia de sismos.

El estado de Guerrero es uno de los más activos sísmicamente del país. En esta región, la placa de Cocos se está metiendo por debajo de la placa de Norteamérica.

En esta región se registra alrededor del 25 % de la sismicidad que ocurre en territorio mexicano. Esto se debe a la subducción de la placa de Cocos (placa oceánica) por debajo de la placa Norteamericana (placa continental). El contacto de estas dos placas tectónicas ocurre frente a las costas del Pacífico, desde el Estado de Jalisco, hasta el de Chiapas, explicó el organismo.

En lo que va del 2012 se ha registrado a nivel nacional poco más de 4,500 sísmos, de los cuales casi 1,500 han tenido como epicentro el estado de Chiapas, lo que representa poco más del 32% de la actividad sísmica nacional.

El Centro de Investigación en Gestión de Riesgos y Cambio Climático de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), explicó que en el planeta hay 14 placas tectónicas y los contactos en estas placas es donde se disipa la energía en forma de sismo.

“Desde el punto de vista de los sismólogos es mejor que se presenten pequeños movimientos con regularidad, como en el caso de Chiapas, a que se acumule tanta energía como para provocar un terremoto”.

Los especialistas advierten que en el caso de Guerrero, “hay indicios de acumulación de energía que podría disparar un terremoto importante.”

Algunos de los sismos importantes que han ocurrido en el estado de Guerrero son el Sismo del Ángel del 28 de julio de 1957 de magnitud 7.5, y el Sismo de Petatlán del 14 de marzo de 1979 con magnitud de 7.6 grados.