Un sistema de fuertes tormentas se movió hoy hacia la porción medio atlántica de Estados Unidos tras dejar un saldo de 13 personas
fallecidas en el centro-oeste del país desde inicio de semana.
Cuatro mujeres y dos hombres murieron este miércoles en Harrisburg, Illinois, cuando una casa fue levantada por un vendaval de casi 210 kilómetros por hora y al caer la vivienda aplastó a la familia completa.
Más de un centenar de residentes de Harrisburg permanecen hospitalizados con lesiones, mientras que unas 300 construcciones urbanas fueron destruidas o severamente dañadas, indicaron reportes oficiales.
La escala federal estadounidense de magnitud de tornados Enhanced Fujita calificó a los eventos de los últimos dos días como de categorías EF-4, solo un punto menor que los de máxima potencia destructora.
El Servicio Nacional de Meteorología (SNM) recordó que el anterior EF-4 pasó por Tuscaloosa, Alabama, en abril de 2011, y mató a 64 individuos.
Luego, el 22 de mayo del año pasado, se formó un multivórtice EF-5 en Joplin, Missouri, que dejó una estela de 161 fallecidos en el centro de la norteña nación.
Según el SNM, este año han aparecido en Estados Unidos más torbellinos que de costumbre para esta época. Ya en enero dos personas murieron en Alabama por esta misma causa.
En total el año anterior 550 personas fallecieron como consecuencia del impacto de estas mangas de vientos, la temporada más fatal desde 1925, cuando los muertos llegaron a 794.