Un terremoto de magnitud 6,6 en la escala abierta de Richter que sacudió la península de Kamchatka, en el extremo oriente de Rusia, no ha causado víctimas ni daños en los edificios de las poblaciones afectadas, informó el Ministerio ruso de Situaciones de Emergencia.
“Los grupos operativos de salvamento y bomberos han terminado las tareas de inspección en las poblaciones afectadas. Los edificios no han sufrido daños. No hay grietas ni otros signos“, informó el servicio de prensa local del Ministerio de Situaciones de Emergencia, según la agencia Interfax.
De acuerdo al Servicio Geológico de EEUU (USGS), el sismo ocurrió a 22,8 kilómetros de profundidad a las 04.09 GMT y el epicentro se ubicó en un enclave en la costa del mar de Bering 78 kilómetros al norte-noreste de Ust-Kamchatsk y 134 al este-noreste de Kliuchí.
Al terremoto de 6,6 le siguió una réplica de magnitud 4,9 pasados 25 minutos.
El lugar del epicentro está situado a más de 500 kilómetros de la capital regional, Petropávlovsk-Kamchatsk, y en los pueblos cercanos se registraron sacudidas de magnitud 5.
En un primer momento se anunció una alerta de tsunami tras el terremoto, pero la dirección regional del Ministerio de Emergencias de Rusia lo descartó casi inmediatamente.
“No existe peligro de tsunami a consecuencia del terremoto”, señaló un comunicado de la entidad publicado en su página web. Según dicho Ministerio, todos los servicios de infraestructuras básicas funcionan con normalidad.