Días de intensas lluvias habían preparado el terreno. Y la zona, vulnerable, no aguantó más. Sobre las 21:30 (hora local) del jueves el deslizamiento de tierra se hizo inevitable. Parte de un cerro de unos 100 metros de altura colapsó y arrasó con la humilde localidad de Santa Catarina Pinula, 15 kilómetros al sur de Ciudad de Guatemala.
En el segundo día de operaciones, los equipos de rescate trabajan contrarreloj para dar con los 350 desaparecidos. El Ministerio Público informó este sábado que habían trasladado 44 cadáveres hasta una morgue provisional.
La portavoz del Ministerio Público, Julia Barrera, indicó a periodistas que sólo 20 de las víctimas mortales han sido identificadas, mientras que de las 24 restantes solo se han recuperado partes.
Las autoridades ya aseguraron que la cantidad de muertos sólo irá en ascenso.
Bomberos, militares, socorristas y voluntarios, unas 1.200 personas en total, participan de las tareas de rescate.
Máquinas excavadoras, palas y perros son parte del equipo que tiene la tarea de encontrar lo antes posible a sobrevivientes de la tragedia.
La cantidad de personas que se encontraba en la zona en el momento del deslizamiento no está clara y las autoridades explicaron que había viviendas en condición irregular por lo que es difícil conocer con exactitud el número de residentes en el área.
Zona de riesgo
Las autoridades aseguraron que ya en 2008 habían advertido a los residentes de esta zona que se trataba de un área de riesgo y habían dado el último aviso a fines del año pasado. Ese informe de la dependencia, solicitado por las autoridades de la localidad, daba cuenta de la inestabilidad del terreno debido a la erosión que afectaba a las laderas del cerro.
Con el tiempo, las crecidas del río Pinula, que corre por el fondo del cerro, había hecho que el área sufriera de "socavación y erosión en terrenos y viviendas", de acuerdo a ese reporte oficial. Pero nada cambió. Menos de un año después, la tierra dijo basta.
La intensa temporada de lluvias, que comenzó en mayo y ha dejado casi medio millón de damnificados, terminó de desencadenar el horror.
Se calcula que hasta 300.000 personas en el área metropolitana de la capital residen en condiciones similares a las de la localidad de Santa Catarina Pinula.
Son más 230 los asentamientos considerados "de riesgo", ubicados en barrancos o laderas de tierra inestable.