Un terremoto de magnitud 5,7 sacudió la costa este del sur de Japón el sábado a las 16:50 GMT, según el Servicio Geológico de Estados Unidos. No se espera que el sismo provoque un tsunami, y no se informó de daños importantes.
Ocurrió a una profundidad de alrededor de 20 millas por debajo de la superficie de la tierra.
La agencia inicialmente marcó el sismo de una magnitud 6,1, pero luego rebajó a 5,7.
El USGS emitió una "alerta verde", lo que significa que hay una probabilidad del 99 por ciento no habrá muertes y muy poco en términos de pérdidas económicas. Cerca de 8.000 personas se encuentran en una zona donde "débil" sacudiendo generalmente se puede sentir.
Los terremotos son una ocurrencia común en la región, donde la Placa Filipina se encuentra con la Placa de Sunda al oeste y la Placa del Pacífico hacia el este.
Este temblor no se originó en la misma región que el gran terremoto de 9,0 grados de magnitud que sacudió el centro de Japón en 2011. Ese terremoto creó un tsunami devastador que destruyó las comunidades a lo largo de la costa este de Japón y provocó el derrumbe de tres núcleos en el Daiichi de energía nuclear de Fukushima. Ese sismo fue causado por la subducción de la Placa del Pacífico bajo la Placa de Honshu.
Sismos de magnitud similar a menudo golpean la costa de las naciones del Pacífico. Filipinas vio una en octubre que agrietado las paredes de algunos edificios, pero no hubo heridos graves o daños se informó. Comparativamente, un terremoto de 5,7 grados de magnitud que azotó a sólo 25 millas de la costa de Ferndale, California, a finales de enero había "nada fuera de lo normal", según la oficina del alguacil del condado.