TORMENTA DE RADIACION SOLAR SE EXTENDERA HASTA EL 19 DE JULIO

Una nueva alerta de tormenta de radiación solar se está registrando hoy, tras una nueva llamarada solar de clase M1.8. El Centro de Previsión Espacial emitió un aviso por la llegada de un elevado flujo de protones iniciado a las 17:15, hora UTC.

LLAMARADA SOLAR CLASE M1.8, 17 DE JULIO 2012
El impacto es de una tormenta de radiación menor o S1 (en la escala en que S5 es la mayor); esto significa que el principal efecto es electromagnético, con impacto en las comunicaciones de alta frecuencia, especialmente a nivel de los polos. La propagación de radio de baja frecuencia también puede resultar afectada.

Según la Agencia Atmosférica y Oceanográfica de Estados Unidos (NOAA), no hay riesgos a nivel biológico para el personal aéreo de altura.

Un aviso preliminar indicó una tormenta geomagnética iniciada a las 16:30 que se extendería hasta las 12:00, hora UTC del 19 de Julio.

Después de una fuerte llamarada solar de clase X1.4 ocurrida el 12 de julio, se registraron altos niveles de radiación el mismo 12 y 13 julio, para finalizar el 16.

Desde la tarde del 14 de julio el campo magnético de la Tierra se vio afectado y se produjeron tormentas geomagnéticas de nivel G1 y G2 (nivel menor, en que G5 es el mayor), durante el 15 y 16 de julio para decaer hoy en tormentas aún menores, solo en los polos.

Se registraron alarmas en las tensiones eléctricas, y en algunos casos pudo haber provocado daño en los transformadores, informa NOAA. Las operaciones espaciales en estos casos son controladas en caso de requerir modificaciones.

Las auroras boreales se observaron hasta los 60 grados de latitud.

Elevados flujos de electrones
Una alerta por elevados flujos de electrones se emitió el día de hoy. Esto afecta solamente a nivel de los satélites, en el caso de sobrecarga en los sistemas.
Es posible que se produzcan eventos aislados moderadas y o menores el día de mañana.
El Sol se encuentra en un período en que podría alcanzar su máxima actividad solar (máximo solar), esperada según los astrónomos para 2012 o 2013.